Autor: China Miéville
Editorial: Ediciones B (NOVA)
Género: Adultos / Ciencia Ficción
S O B R E E L L I B R O
La metrópolis de Nueva Crobuzon se extiende desde
el centro del mundo. Humanos, mutantes y razas arcanas malviven en la penumbra
bajo sus chimeneas, donde el río se trona viscoso por los afluentes
artificiales, donde las fábricas y fundiciones amartillan la noche. Durante más
de mil años, el Parlamento y su brutal milicia han gobernado una vasta economía
de obreros y artistas, espías y soldados, magos, yonquis y prostitutas. Pero
acaba de llegar un extraño con el bolsillo lleno y una demanda imposible. De forma
torpe, inadvertida, algo imposible es liberado.
Dotado de un especial talento para las
ambientaciones exóticas, China Miéville convierte a Nueva Crobuzon en un
vigoros escenario en el que se dan cita los ecos de un Londres victoriano, la
distopía más agria, la poderosa imaginería de la literatura gótica y originales
razas atropomórficas. Sirviéndose de los recursos clásicos de la literatura
fantástica y de anticipación, inaugura una fórmula narrativa fresca y novedosa,
capaz de fascinar por igual a público y crítica hasta convertir "La
estación de la calle Perdido" en la gran revelación de 2000 en el Reino
Unido, donde ha sido galardonada con los principales premios literarios.
O P I N I Ó N P E R S O N A L
Simplemente extraordinario.
Mieville está usando el
lenguaje para atraerte a un mundo que es como el nuestro, pero un poco diferente:
una distopía oscura, mórbida y fantástica que es algo así como las historias de
Edward Gorey, Julio Verne y Charles Dickens. Es un entorno sucio, de baja
intensidad, de ciencia ficción con magia, realmente impresionante y magnífico.
En resumen, es exactamente
lo que debería ser la ficción "especulativa".
No quiero estropear nada, y
me resulta difícil resumir este libro sin lanzar un spoiler, así que en vez de eso te daré un consejo:
Lee este libro. Léelo ahora.
Ve el lenguaje no como un obstáculo, sino como parte de la fibra de este mundo.
Es una bebida larga y lenta de whisky servida por un idealista, pero les
aseguro que realmente disfrutaran esta lectura de principio a fin y, sobre
todo, quedarán con ganas de más.